Abandono escolar un desafío persistente que requiere acciones decididas

Abandono escolar un desafío persistente que requiere acciones decididas

En México, el abandono escolar es un fenómeno ligado a vulnerabilidades sociales, económicas, geográficas y de género, que provoca obstáculos significativos que impiden que muchos niños y jóvenes no alcancen un grado de escolaridad que les permita acceder a mejor calidad de vida y de oportunidades laborales.

En México el 30% de la población tiene entre 0 y 17 años (aproximadamente 37 millones de personas), de cuales el 97% tienen cubierta su educación primaria, en secundaria baja al 84% y en preparatoria al 62%.  

Aunque la educación obligatoria es gratuita, los gastos asociados con la asistencia a la escuela son, en una gran parte de la población, un problema difícil de afrontar lo que eleva la probabilidad de que los niños y jóvenes no la concluyan.

Existen otros problemas asociados con el abandono escolar, uno frecuente es que el ambiente familiar no genera la motivación y el apoyo para permanecer en la escuela. Un dato importante es que, en 2020, alrededor de 2 de cada 5 niños residían en hogares donde el jefe del hogar no terminó la secundaria o nunca fue a la escuela (mejoredu.gob.mx).

¿Cómo disminuirla? De acuerdo con Leopoldo Ocaña (CEO de Lexium, empresa de aprendizaje), se debe comenzar con la apertura de programas para apoyo socioeconómico en estudiantes de bajos recursos, puestos estos reducen la carga financiera de las familias pues permite subsidiar materiales escolares y uniformes.

Así mismo, es importante fortalecer programas de educación preescolar y garantizar la matriculación obligatoria.  Además de implementar programas de estimulación temprana (que fomentan el interés y habilidades académicas desde la infancia), esto ayuda a que los estudiantes visualicen sus metas y motiven su compromiso educativo.

También, al establecer programas de tutorías para estudiantes en riesgo (con apoyo individualizado) para abordar dificultades académicas, se fomenta el interés y la participación de los estudiantes.

Inclusive, involucrar a la comunidad en el proceso educativo puede ser un factor clave para prevenir la deserción escolar. Establecer colaboraciones entre escuelas, familias y organizaciones comunitarias puede crear un entorno de apoyo más sólido para los estudiantes.

La participación de la comunidad puede llevar a la identificación temprana de posibles problemas, proporcionar recursos adicionales y fortalecer la red de apoyo necesaria para mantener a los estudiantes comprometidos y motivados en su educación.

“Realizar jornadas de información para padres, sobre la importancia de la educación y cómo pueden apoyar a sus hijos, facilita identificar a tiempo a los estudiantes en riesgo. Inclusive, monitorear regularmente los indicadores de deserción escolar y ajustar las estrategias de intervención, según sea necesario, mejora las condiciones de las escuelas, garantizando un entorno propicio para el aprendizaje”, añadió Leopoldo Ocaña, CEO de Lexium.

Lexium

Plataforma para la potencialización del aprendizaje con servicios para estudiantes y universidades.

Sitio: www.lexiumonline.com

Contacto: Gabriel Rojas, Ejecutivo y Socio en Property Relaciones Públicas

Correo de Prensa: gabrielrojas@propertypr.com.mx

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