¿Tu empresa tiene el perfil que se requiere para hacer home office?

Dadas las circunstancias en las que nos encontramos actualmente, el trabajar desde casa se ha vuelto nuestro pan de cada día. ¿Y en qué consiste realmente esta modalidad? Entre sus componentes se encuentran: los horarios flexibles, la posibilidad de reuniones virtuales, el uso de dispositivos propios y sobre todo, el enfocarse más a objetivos cumplidos que a horas trabajadas.

Un reciente estudio realizado Owl Labs, empresa americana especializada en crear dispositivos de videoconferencias, afirma que las personas que trabajan remotamente son un 24% más propensas a ser felices y productivas. Esto se debe a que existe una disminución de tensión (que se tiende a dar más dentro de una oficina), un claro ahorro monetario en transporte, y la posibilidad de manejar un horario propio.

Si vemos el otro lado de la moneda, el “home office” también tiene beneficios para el empleador ya que le permitirá reservar el trabajo presencial para reuniones y tareas que requieran más calidad y las ventajas del contacto humano. Además, se eliminará casi completamente el absentismo laboral y en un mediano plazo, se reducirán los costes de producción y se denotará el ahorro en el mantenimiento de infraestructuras innecesarias.

Pero por muchas ventajas que tenga este concepto, no es algo que se pueda implementar de la noche a la mañana y no todas las empresas en nuestro país están preparadas para implementar el esquema de manera inmediata. “Para implementar una propuesta de Home Office en nuestras empresas primero tenemos que asegurarnos que contamos con lo necesario. En cuestión de los empleados que cuenten con el perfil adecuado, es decir las habilidades clave que harán que su trabajo siga siendo productivo, y por otro lado contar con las herramientas digitales que nos ayuden optimizar nuestras tareas.” afirma Andrea Vargas, directora de Potentor y experta en Recursos Humanos.

Entonces ¿Cuáles son los pasos por seguir? Primero, habrá que formar a tu equipo en esta modalidad; Es decir, el empleador deberá de encontrar la manera de hacer sentir cómodo a su equipo, brindándoles las facilidades para que puedan trabajar de una manera proactiva.

Posteriormente, habrá que balancear las tareas de cada miembro en base a sus aptitudes y habilidades, pues de esta manera se podrá sobre llevar la carga de trabajo de una mejor manera.

También será necesario evitar todo tipo de conexiones públicas y gratuitas para no comprometer la información de la empresa. Habrá que verificar los perfiles de acceso a las plataformas de la empresa y delimitar quiénes tendrán acceso a una red virtual privada (VPN) y cómo hacer uso de ella de manera segura.

Tomando en cuenta los pasos a seguir y los componentes dichos antes, seguramente tendrás en tus manos una fórmula ganadora y tu empresa será más fuerte que nunca.

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